Crítica: Everything Will Be OK
por David Katz
- BERLINALE 2022: El nuevo documental de Rithy Panh es un gran ejercicio visionario, relatado con figuritas de madera, en la que los animales han evolucionado hasta esclavizar a los humanos
En la escultura existe la teoría llamada “surplus matter”, que versa sobre la importancia de la materia. Según ella, dentro de la piedra ya existe la estatua y la tarea del artista no es crear la obra, sino simplemente retirar todo aquello que la rodea. Así es como, de un gran número de leños, salen las elaboradas figuritas del realizador de origen camboyano y francés Rithy Panh. Se hace extraño pensar en ellas en términos escultóricos: a partir de un simple trozo de madera, Panh y sus técnicos han creado con sus propias manos un pequeño universo, un mundo en miniatura que describe hábilmente los horrores de nuestro mundo.
Tras rodar varios trabajos fundamentales sobre el genocidio camboyano al que él mismo sobrevivió, Panh escoge ahora una visión más general y universal acerca de la tiranía y el terror políticos, y todo contado a través de chocantes motivos visuales en la pantalla que no dan tregua a la vista. Irradiés [+lee también:
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ficha de la película], la primera película de este corte, participó en la Berlinale de 2020, y ahora llega Everything Will Be OK [+lee también:
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ficha de la película], que se estrena y compite en la primera edición física del festival en dos años.
Esta película es en cierto modo una gran “teoría del todo”, y partiendo de que la espontaneidad visual es más habitual en el cine de arte y ensayo, resulta hasta refrescante ver algo diseñado con tanta atención al detalle y tanto dinamismo gráfico. Everything Will Be OK retrata un mundo distópico en el que un carismático señor de la guerra con forma de facóquero ha esclavizado a la humanizado y ha sometido a los supervivientes siguiendo el modelo del faraón egipcio o de los primeros colonizadores europeos en África. Es una tecnocracia animal: unos cerdos antropomorfizados llevan la voz cantante, bien repartiendo castigos autoritarios o repantigándose en lujosas cuevas con pantallas de televisión y una psicodélica y colorida iluminación. Se alternan con mimo amplias imágenes panorámicas y primerísimos planos, una mirada que rivaliza con los lujosos efectos especiales hollywoodienses y que sin embargo, no olvidemos, tiene su origen en unos cuantos troncos de gran tamaño (esperamos que no haya sido un bosque entero).
Panh utiliza las imágenes de archivo de atrocidades históricas con dos finalidades: por un lado son una broma pesada sobre las preferencias de visualización de estos cerdos-fascistas, y por el otro, aturden a la audiencia en una especie de sumisión; reflexionan, quizá en un sentido demasiado amplio, sobre la propensión de la humanidad del siglo XX al horror y sobre el hecho de que podría volver a repetirse a pesar de haber sucedido ya a tal escala. La mayor invocación a la crisis actual, más que a los abusos del Estado, va dirigida a la pandemia: las figuritas humanas, con la boca tapada por mascarillas quirúrgicas, que son conducidas y atadas, apuntan a esto de forma ambigua, si bien para este crítico no se hace tanta referencia al sentimiento anticonfinamiento como a una claustrofobia y desesperación generalizadas. Una monótona voz en off, la de la actriz francesa Rebecca Marder, envuelve sonoramente la acción y suelta acertijos godardianos cargados de fatalidad ("La revolución es la verdad convertida en un acto de terrorismo") que nunca llegan a empastar de forma significativa con las imágenes.
Pero conforme se acerca el final del metraje es cierto que de alguna manera todo está bien, toda vez que la dictadura animal ya es historia; la película hace un guiño conmovedor a la experiencia de Panh en Camboya, donde los frondosos escenarios, ahora ajenos al régimen y finalmente llenos de espacios verdes, ofrecen la posibilidad de renovación, reflexión y escape.
Everything Will Be OK es una coproducción entre Hong Kong y France, en manos de CDP - Catherine Dussart Productions. Playtime se encarga de sus ventas internacionales.
(Traducción del inglés por Marcos Randulfe)
Galería de fotos 11/02/2022: Berlinale 2022 - Everything Will Be OK
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