email print share on Facebook share on Twitter share on LinkedIn share on reddit pin on Pinterest

ATLÀNTIDA FILM FEST 2020

Crítica serie: Stieg Larsson: El hombre que jugó con fuego

por 

- Cuatro ágiles capítulos analizan la personalidad del escritor sueco, mientras su constante y férrea lucha contra el fascismo refleja también la historia política reciente de su país

Crítica serie: Stieg Larsson: El hombre que jugó con fuego
Stieg Larsson en Stieg Larsson: El hombre que jugó con fuego

La décima edición de Atlàntida Film Fest, que se celebra online durante el mes de agosto, ha reservado una parte de su programación –centrada temáticamente en nuestro continente– a las series de televisión, que tan buena acogida gozan actualmente gracias a las plataformas de streaming. Entre las programadas por el festival que dirige Jaume Ripoll (leer entrevista) destaca la producción sueca Stieg Larsson: El hombre que jugó con fuego que, como su título señala, se centra en la figura del desaparecido escritor, autor de la exitosa saga que se inició con el libro súper ventas Los hombres que no amaban a las mujeres, que llegó a tener su adaptación cinematográfica, tanto nacional como en Hollywood.

(El artículo continúa más abajo - Inf. publicitaria)

La serie que ha dirigido Henrik Georgsson (extensión de su formato largometraje, el homónimo Stieg Larsson: El hombre que jugó con fuego [+lee también:
tráiler
ficha de la película
]
, que se estrenó en el festival de Sundance del año pasado) no deja respiro: es tan ágil como una novela del protagonista de la misma. Incluye las consabidas entrevistas con amigos y compañeros del firmante de la trilogía Millennium, así como de historiadores y otros analistas, además de documentos visuales –algunos de una fuerza dramática arrolladora– y reconstrucciones (a cargo del actor Emil Almen interpretando a Larsson), logrando que resulte imposible no sucumbir tanto a la personalidad de ese trabajador hiperactivo y nocturno como a la descripción de un momento convulso y difícil de la historia reciente de su país, Suecia.

Porque sin caer en el efectismo de saldo habitual en las alargadas series documentales de Netflix, que tanta aceptación popular tienen, Georgsson opta por alternar momentos temporales con declaraciones (incluidas entrevistas con el escritor) que van desentrañando la extraordinaria, obsesiva y peculiar personalidad de Larsson, un hombre de tan férreos principios éticos y morales que éstos espolearon su vida y su obra hacia la lucha febril contra los abusos y las injusticias.

Larsson se descubre así como un ser humano que creía en valores como la igualdad, la democracia y la libertad, algo que queda patente en su obra literaria y en sus actos personales, donde sobresalen sus investigaciones –alguien le llega a definir, en un episodio de la serie, como un detective privado– rastreando a partidos neonazis (de quienes llegó a recibir serias amenazas) y su combate contra los extremismos políticos alejados de la concordia y la tolerancia.

Stieg Larsson: El hombre que jugó con fuego es una serie de cuatro capítulos –de 45 minutos de duración cada uno de ellos– que se puede ver en la plataforma Filmin hasta el 27 de agosto. Se trata de una producción de las compañías suecas B-Reel Films y Film i Väst, que distribuye SF Studios y de cuyas ventas internacionales se ocupa la agencia alemana The Match Factory.

(El artículo continúa más abajo - Inf. publicitaria)

¿Te ha gustado este artículo? Suscríbete a nuestra newsletter y recibe más artículos como este directamente en tu email.

Privacy Policy