04/11/2010

Como cada año desde 1991, Alemania oriental acoge el festival de cine de Europa del este de Cottbus, inaugurado anteayer –hasta el 7 de noviembre– con la proyección de la coproducción entre Alemania y Serbia The Woman with a Broken Nose [+lee también:
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ficha de la película], de Srdjan Koljevic.

Diez largometrajes participan en la competición principal: la seleccionada en Cannes Adrienn Pál [+lee también:
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entrevista: Agnes Kocsis, directora de…
ficha de la película], de Ágnes Kocsis; las serbias Tilva Rosh, de Nikola Lezaic, y White White World [+lee también:
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ficha de la película], de Oleg Novkovic; la coproducción entre Austria y Rumanía Periferic [+lee también:
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entrevista: Ana Ularu
ficha de la película] de Bogdan George Apetri –que acaba de ganar el premio FIPRESCI en la Viennale–; Mother Teresa of Cats, del polaco Pawel Sala; la checa Kajinek [+lee también:
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ficha de la película], de Petr Jákl; The Temptation of St. Tony [+lee también:
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ficha de la película], del estonio Veiko Öunpuu, y la coproducción neerlando-germano-franco-kirguís The Light Thief, de Aktan Arym Kubat.

Además de las proyecciones especiales –entre las que destacan las aventuras del conejo Esterhazy, de Izabella Plucinska, y The North of Calabria, de polaco Marcin Sauter–, la sección paralela Spectrum sigue proponiendo trabajos de nivel internacional como Womb [+lee también:
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ficha de la película], del conocido director húngaro Benedek Fliegauf, y el thriller checo Walking Too Fast [+lee también:
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entrevista: Radim Spacek
ficha de la película], de Radim Spacek.

En cuanto a las secciones habituales, Cottbus ofrece una selección de éxitos alemanes, un programa de cine joven, un Focus dedicado esta vez no a un país en particular sino a las relaciones del cine de Europa oriental con el resto del mundo y una retrospectiva que compara el trabajo de dos escuelas de cine alemanas: una del este (la escuela Konrad Wolf de Potsdam-Babelsberg) y otra de oeste (la dffb de Berlín). La sección "Horizontes polacos" da muestra de la vanguardia del cine del país vecino (destaca la proyección de Venice, de Jan Jakub Kolski), mientras que la competición germano-polaca, compuesta por películas dirigidas a adolescentes de entre 14 y 18 años y arbitrada por un jurado joven paritario, ya es un componente permanente de la programación de Cottbus.

Los profesionales de la industria, por su parte, pueden reunirse en el mercado de la coproducción Este-Oeste Connecting Cottbus.