20/07/2022 - El cineasta francés explica su nueva comedia de autor, en donde la amistad y el estar juntos al final de la infancia se observan a través del revuelo de una misión ecológica muy peligrosa

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ficha de la película], que sigue a un grupo de jóvenes atrapados en la espiral de una guerrilla ecológica exagerada, es el décimo largometraje de Pierre Salvadori (cuyo último trabajo, En liberté ! [+lee también:
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ficha de la película], se estrenó en la Quincena de los Realizadores de 2018). Gaumont estrena hoy la película en los cines franceses.

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Cineuropa: ¿Por qué una película sobre una banda de preadolescentes?
Pierre Salvadori: Al principio, tenía la idea de una banda de inútiles y de una especie de acto político un poco estúpido. Pero yo me dije que ya había hecho eso, unos torpes enfrentándose a algo demasiado grande para ellos. Sin embargo, me interesaba ese tema y de repente se me ocurrió que fuesen niños. Eso abría muchas posibilidades en cuanto a cuestiones del grupo como la lealtad, la valentía o lo que el grupo puede liberar de inconsciencia y de locura (no nos atrevemos a decir que no, tenemos miedo, queremos estar a la altura de la idea que se hacen los otros de nosotros, nos volvemos más audaces). Todo tenía más sentido: era su tiempo, su futuro, y estos niños que primero hacen una tontería por motivos un poco egoístas, un poco ridículos (por amor, por deseo de venganza, etc.), apropiándose de una idea, y luego se ven atrapados por la situación y van a dar sentido a posteriori a alguna cosa loca que los supera. Podía hacer una comedia con un guion secreto muy rico: cómo el placer de estar juntos construye un ideal, un lado cinéfilo “hawksiano” sobre cómo aprendemos a vivir y a pelear juntos, pero también sobre la prevalencia del grupo sobre el individuo, cómo el grupo te eleva, te inspira, te tranquiliza cuando estás mal, cuando tienes problemas familiares, pero de repente todo desaparece en la en la inocencia y la alegría. En ese momento, vi dibujarse una película a toda velocidad.

La película habla de ecología, pero, ¿no lo tratas como un programa militante?
Yo no quería una película pontificadora sobre ecología, ni hacer moral. El tema es el grupo, la banda. La ecología está más bien detrás, algo casi falso al principio y que luego se apoderará de ellos. La creación del grupo es paradójica porque el que inicia el proyecto lo hace en realidad para que falle. Además, todos tienen motivos secretos. Luego, estando juntos, esa vibración y euforia se apodera de ellos, están atrapados en algo más grande y aquí es donde llega la consciencia: se ven obligados a dar sentido a su gesto. La película es una larga deliberación: ellos se plantean muchas preguntas sobre lo que tienen derecho a hacer o no. Hay nobleza, pues tienden hacia una forma de belleza y son dignos, pero también hay malentendidos porque se trata de una comedia y eso es lo que me gusta.

El marco, esa naturaleza omnipresente, encaja a la perfección con esa toma de consciencia.
Ella influye en ellos. No había que eliminar eso y conseguir grabar la naturaleza en toda su belleza vibrante. En mi caso, en toda mi infancia, la naturaleza me salvó, me enriqueció. Una perspectiva de Córcega tuvo en mí un efecto maravilloso, mágico, tranquilizador. En la película pasa algo parecido, la belleza de la naturaleza, del río, ennoblece a los niños, los engrandece y crea una verdadera relación con esa causa ecológica que encarna: ellos comprenden la importancia de esta belleza bastante sorprendente. Hay películas que cuentan cómo llegamos a amar, aquí estamos ante una película sobre cómo llegamos a la belleza de la naturaleza y a un ideal político de una determinada manera.

¿Cómo dosificaste la comicidad y el retrato psicológico de los cinco protagonistas?
Para mí es muy importante intentar comprender quién es quién en una película, como si fuese una investigación sobre personajes donde descubrimos quién es quién realmente. Pero me gusta que una película también siga siendo un espectáculo. El cine es el último arte popular y, como dijo Scorsese, los cineastas son contrabandistas que esconden los temas en relatos de aventuras, en el cine de género. A mí me interesa que una película sea entretenida, interesante, divertida, pero que detrás, con delicadeza, haya algo subyacente.

(Traducción del francés)