email print share on Facebook share on Twitter share on LinkedIn share on reddit pin on Pinterest

ZINEBI 2020

Pablo Maqueda • Director de Dear Werner

“La película me ha ayudado a vencer algunos miedos”

por 

- Con el documental Dear Werner, el madrileño Pablo Maqueda sigue los pasos de su admirado Herzog, repitiendo un viaje suyo con idéntico espíritu aventurero, fe y apasionado amor por el cine

Pablo Maqueda • Director de Dear Werner
(© Daniel Mayrit)

Tras su selección en el reciente Festival de Cine Europeo de Sevilla, antes del de Turín y a sólo dos días del estreno en salas españolas (este viernes 20 de noviembre), se presenta en la sección Begiradak-Miradas desde Euskadi, de la edición número 62 de Zinebi, Festival Internacional de Cine Documental y Cortometraje de Bilbao el documental Dear Werner [+lee también:
crítica
tráiler
entrevista: Pablo Maqueda
ficha de la película
]
de Pablo Maqueda (Madrid, 1985).

(El artículo continúa más abajo - Inf. publicitaria)

Cineuropa: ¿Por qué te has decantado por homenajear a Werner Herzog y no por Pedro Almodóvar, François Ozon o Yorgos Lanthimos?
Pablo Maqueda:
Es un cineasta poco reivindicado, en quien nos inspiramos muchos directores por su espíritu de conquista e intentar rodar lo no filmado; y esa economía de medios la hemos aprendido de su cine, sobre todo de sus últimos documentales, donde da igual con qué cámara se ruede, sino lo que estás filmando: el hecho de subir a la cima de un volcán para intentar grabar esa lava incandescente que nadie más ha captado... Él me enseñó el concepto de cine de autor, no desde la puesta en escena, sino desde la trama y la construcción de los personajes, siempre locos e intentado alcanzar el último confín de la Tierra. Me apetecía reivindicarlo porque me encontraba en un momento en que dudaba sobre las ganas de hacer cine: su libro Del caminar sobre el hielo me inspiró hasta el punto de seguir sus pasos.

Te has convertido entonces en una versión joven y española de Klaus Kinski…
[Risas] Sí, durante el rodaje he podido vivir momentos en los que me sentía un personaje construido por el propio cineasta alemán, sintiendo y viviendo epifanías herzogianas, como ir caminando por la Selva Negra, completamente temeroso y encontrarme una cascada de 20 metros: fue un momento místico. Ha sido una película que me ha ayudado a vencer miedos: a lo desconocido, a lo físico y a la oscuridad, aprendiendo de esa valentía que él ha demostrado con su cine.

Herzog ha colaborado, pero… ¿Cómo ha sido el contacto con él?
Me habían contado que era una persona inaccesible, pero por el cariño y la verdad que hay detrás de la película, esto le animó a ayudarnos: le escribimos a través de su productora y a los pocos días nos respondió desde su correo personal. Él ha visto el film varias veces, ha participado en el guion, ha sugerido cambiar algunos fragmentos –animándome a hablar más de mí que de él– y ha sido un acto muy generoso por su parte: que narrara él mismo esos fragmentos del libro, con ese acento tan característico, que para mí es como la voz de Dios…

Tener de asesor a Herzog es más que ganar un premio en la lotería…
¡Completamente! Tengo largometrajes previos, más pequeños y auto producidos, pero éste lo he enfrentado con una mirada, romanticismo y cinefilia casi adolescentes, intentando hablar como un estudiante que idolatrara el cine de Herzog sin saber siquiera cómo se construye una imagen. Y en mitad de una pandemia: el confinamiento ha hecho que podamos tener un diálogo más íntimo y dilatado en el tiempo. Que me diga que mi espíritu de joven cineasta le recuerda a él cuando rodó Nosferatu, rindiendo homenaje a Murnau, ha sido muy especial.

Antes mencionabas que Dear Werner surgió en un momento profesional crítico…
Sí, Dear Werner nació de la frustración: llevo siete años intentado sacar adelante La desconocida, un largometraje con vocación comercial (más información aquí), que rodaremos el año que viene, pues nos han dado la ayuda selectiva del ICAA y han entrado Telemadrid y Filmax. En esos años he podido vivir los largos procesos de financiación en España. Aprender ese camino junto a mis productores me ha marcado como cineasta y lo quería reflejar en este documental: no hablar del director en clave de éxito, alfombra roja y premios, sino como alguien que camina solo, bajo el frío y en la niebla, para sacar adelante un proyecto; que está hundido. Porque el cine es eso: entre películas tienes que intentar llegar a fin de mes. Me apetecía reivindicar esa conciencia de clase obrera, en un momento en el que el panorama cinematográfico está cambiando y el propio concepto de autor se está resquebrajando por el panorama post-covid y el cierre de las salas; y cómo hoy los espectadores van a tener más difícil acceder a determinadas películas en los cines.

(El artículo continúa más abajo - Inf. publicitaria)

¿Te ha gustado este artículo? Suscríbete a nuestra newsletter y recibe más artículos como este directamente en tu email.

Lee también

Privacy Policy