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ALEMANIA

Anca Miruna Lazarescu • Directora de Somos la Ola

"El lujo de excavar en las profundidades de una historia es solo posible en el formato de las series"

por 

- German Films ha hablado con la directora rumana afincada en Alemania Anca Miruna Lazarescu, cuya serie Somos la Ola se ha estrenado recientemente en Netflix

Anca Miruna Lazarescu • Directora de Somos la Ola
(© Hans-Rudolf Schulz)

Es difícil reunirse con Anca Miruna Lazarescu en noviembre de 2019. Somos la Ola [+lee también:
entrevista: Anca Miruna Lazarescu
ficha de la serie
]
había empezado a emitirse a principios de mes en Netflix. Más tarde, consiguió una agencia internacional para presentar sus nuevos proyectos en Londres. A mediados de noviembre fue presidenta del jurado del Munich Film School Festival (la ciudad donde estudió y donde se estrenó su primer largometraje). Luego estaban sus planes de grabar un documental en Rumanía y continuar las negociaciones para una nueva serie en streaming. Además, esta madre de dos hijos quería tener tiempo para ver a su familia. En resumen, tenía mucho que hacer.

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Pero cuando se produce el encuentro, ella está en su salsa. Se ve como narradora y, por eso, un almuerzo se convierte en una tarde animada repleta de historias sobre sueños perdidos y esperanzas entre Oriente y Occidente, la sociedad en la que vivimos, y el escepticismo saludable hacia la industria cinematográfica.  

“Una vez un director me dijo que, hasta su tercer largometraje, le asustaba que no volvieran a llamarlo”. ¿Y dónde está ella ahora? “Estoy recibiendo llamadas”. Dice esto con una sonrisa tranquila, después de que su cortometraje Silent River (2011) ganara más de 80 premios internacionales. Después de dos aclamados largometrajes, That Trip We Took with Dad (2016) y Happiness Sucks (2018), que fue nominado al German Film Award. Sin olvidar el Grimme Prize por la serie de HBO Hackerville (2018) y la efectiva controversia publicitaria de Somos la Ola.

En medio, llegó a pensar en dejar el negocio. Fue en 2017, cuando llevaba 7 años trabajando en su primera película y el dinero escaseaba. Pero, más tarde, mientras enseñaba interpretación y dirección en Passau, la certeza volvió: “No puedo vivir sin contar historias. Y sin trabajar como directora”. 

Pocos talentos alemanes han aprovechado mejor las oportunidades de la nueva era del streaming. Por supuesto, los nuevos jugadores tienen poco dinero para la producción, y también poco tiempo. En Somos la Ola se produjeron una media de 5 a 6 minutos por día de rodaje. “Duermes menos”, comenta lacónica.

A cambio, experimentó gran libertad. “Quiero poner mi visión en imágenes”, dice. Eso fue posible durante la producción basada en los guiones de Jan Berger. El principio de la serie lo demuestra: Lazarescu grabó la campaña electoral de un partido de extrema derecha llamado NFD, cuyos carteles recordaban a los de Alternativa para Alemania (AFD), mientras exageraba la situación a través del número de extras en una celebración siniestra que evocaba la manía racista de los nazis. Algo que también está arraigado en la propia biografía de Lazarescu. Después de todo, en los años 80, ella misma experimentó la importancia de las sociedades libres en la Rumanía comunista.  

Sus proyectos se caracterizan por la lucha por la libertad personal. Y Somos la Ola se ha convertido en una potente propaganda política. Al contrario que el libro original, la serie no aborda la atracción de los jóvenes por el fascismo, sino el Eros del activismo y la rebelión. “Las cosas no empiezan en un escritorio. Poniéndote de rodillas, perdiendo el control de las cosas, queriendo demasiado”, dice la directora. La historia de los jóvenes activistas que se autodenominan La Ola ha inspirado a jóvenes de todo el mundo, ya que ha habido respuestas en redes sociales desde Brasil, Argelia o Turquía, por ejemplo.  

A ella le gusta mucho el principio de la serie: “Desde que tengo memoria, he perdido puntos porque siempre he probado los límites de los cortometrajes y largometrajes; me he enamorado profundamente de los personajes secundarios y de las tramas secundarias. El lujo de indagar en la profundidad de una historia sólo es posible en una serie”.

El próximo paso es su entrada en la producción internacional de series. Y le están llegando algunas ofertas de primer nivel en este campo. ¡Las historias piden ser contadas!

En colaboración con

 

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(Traducción del inglés)

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