27/03/2018 - Hablamos con la productora y cineasta alemana Cordula Kablitz-Post, que ganó el premio a Mejor Película en el Socially Relevant Film Festival en Nueva York con Lou Andreas-Salomé

Director Cordula Kablitz-Post (right) with head of the Socially Relevant Film Festival Nora Armani

Cordula Kablitz-Post fundó Avanti Media Fiction GmbH en 2012. La primera película producida por la compañía fue Sophiiiie, que recibió el premio a Mejor Director y a Mejor Actriz en el Festival de Cine de Múnich. En 2016, ganó el premio a Joven Investigadora por su primer largometraje, Lou Andreas-Salomé [+lee también:
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entrevista: Cordula Kablitz-Post
ficha de la película], en el International Film Festival Emden-Norderney. Acaba de ganar el premio a la Mejor Película en el Socially Relevant Film Festival en Nueva York (empatada con Hot Country, Cold Winter [+lee también:
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entrevista: David Safarian
ficha de la película] de David Safarian) con el mismo largometraje.

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Cineuropa: Brevemente, ¿de qué va la película?
Cordula Kablitz-Post: La película describe la vida de Lou Andreas-Salomé, quien fue una pintora, pensadora y psicoanalista. Nació en 1861 en la ciudad rusa de San Petersburgo. Lou renuncia a la tradición en pos de la perfección intelectual, revolucionando los corazones y las mentes de los mejores pensadores de principios del siglo XIX, incluidos Friedrich Nietzsche, el poeta Rainer Maria Rilke y Sigmund Freud.

¿Por qué quisiste hacer una película sobre Lou Andreas-Salomé?
Me encontré con su biografía cuando tenía 17 años. Sentí curiosidad por leer la historia de una mujer que fue excepcional en su época. Vivía en contra de las normas de su sociedad; no se preocupaba de que no le permitieran estudiar. Al contrario, hizo todo lo que quería y creo que fue algo inusual para su tiempo. Era muy tenaz y siguió su propio camino. Creo que no es habitual para las mujeres vivir así; es más normal en los hombres. Como una mujer joven, buscaba un modelo a seguir y encontré gran parte de la inspiración en ella. Empecé con la investigación hace ocho años y me sorprendí mucho al darme cuenta de que no se había hecho ninguna película sobre su vida. Me alegra saber que, con esta película, Lou no será olvidada. Es una figura muy importante en la historia porque fue una escritora brillante. Escribió muchas novelas y estudios psicoanalíticos, y muchos de ellos aún no han sido publicados. Con esta película, veo que muchas personas empiezan a leer su obra y a conectar con ella.

¿Te ha cambiado como persona trabajar en esta película durante ocho años?
Para empezar, no planeé trabajar tanto tiempo en esta película. Si alguien me lo hubiera dicho antes, no les hubiera creído. Ha sido un trabajo muy duro. La parte más difícil fue la financiación. Las cadenas de televisión alemanas no financiaron la película; ya, según dijeron, Lou no era lo suficientemente conocida como para invertir dinero en ella. Finalmente, la convertí en una coproducción germana-austríaca y los austríacos fueron fantásticos. Esa es la razón por la que tardé tanto, porque el dinero era un problema. Me cambió en la medida en que me estaba realmente obsesionando con ello; no sé lo que me ocurrió, pero era algo que quería de verdad y no podía parar. Hubo muchos problemas, pero nunca he sentido que quisiera parar la producción. Además, si alguien decía que no les gustaba el guion y había un rechazo por la entidad financiadora, simplemente lo intentaba con otra. Nunca había sido tenaz; quizás Lou me contagió su energía, no lo sé.

¿Eligió a los actores por su parecido con los personajes?
Bueno, fue una mezcla. Elegí a actores de teatro porque pensé que son muy buenos en lo que hacen. Trabajan meses en sus obras – me encantan los actores de teatro. La actriz Katharina Lorenz también se parece mucho a ella. Pienso que Lou, al ser una especie de leyenda, no todo el mundo la había olvidado. Así que quería una similitud, por supuesto. Sin embargo, lo realmente increíble sobre Katharina es que se adaptó 100 % a la personalidad de Lou. Profundizó mucho en su papel. Trabajó en él durante seis años.

¿Por qué decidió hacer un largometraje de ficción en lugar de un documental?
En realidad, yo empecé como una asistente de dirección en una película de ficción. En su mayoría, había hecho documentales, pero, en mi cabeza, quería volver a hacer ficción. Empezó como un documental, pero luego me di cuenta de que no había imágenes reales de Lou, nadie la grabó nunca, e incluso no podíamos oír su voz real. Por eso, pensé que tenía que hacer una película de ficción. Para eso, necesitaba una actriz y no podía usar imágenes originales. 

En ocasiones, la audiencia se ha reído cuando hay escenas complejas relacionadas con la filosofía, ¿era esa su intención?
Por supuesto, queríamos hacerlo un poco divertido. No tenía que ser siempre serio porque la vida no es siempre seria. Creo que las personas inteligentes pueden reír; no están serias todo el rato.

(Traducción del inglés por Begoña Carrasco González)