email print share on Facebook share on Twitter share on LinkedIn share on reddit pin on Pinterest

Xavier Beauvois • Director

"Tenía ganas de hacer una película sobre mujeres"

por 

- TORONTO 2017: Hablamos con el director francés Xavier Beauvois sobre su nuevo film, Les Gardiennes, que se estrena mundialmente en Toronto

Xavier Beauvois • Director
(© Claude Lair)

Estrenado mundialmente en la sección Special Presentations del 42º Festival de Toronto, Les Gardiennes [+lee también:
crítica
tráiler
entrevista: Xavier Beauvois
ficha de la película
]
es el séptimo largo de Xavier Beauvois (premio del jurado y Gran Premio en Cannes en 1995 y 2010 por No olvides que vas a morir y De dioses y hombres [+lee también:
crítica
tráiler
entrevista: Xavier Beauvois
ficha de la película
]
, participó en Venecia en los años 2000, 2005 y 2014 con Según Matthieu, El pequeño teniente [+lee también:
tráiler
ficha de la película
]
y El precio de la fama [+lee también:
crítica
tráiler
entrevista: Xavier Beauvois
ficha de la película
]
). Producido por Les Films du Worso, su nuevo trabajo es la primera cinta de época de su carrera, así como una obra "feminista". Protagonizada por Nathalie Baye, Laura Smet e Iris Bry, se estrenará en Francia el 6 de diciembre de la mano de Pathé, que se encarga también de las ventas internacionales.

(El artículo continúa más abajo - Inf. publicitaria)

Cineuropa: ¿Cómo descubriste la novela de Ernest Pérochon Les gardiennes, y por qué decidiste basar una película en esa obra?
Xavier Beauvois: Era uno de los autores favoritos de Maurice Pialat, y Sylvie Pialat (Les Films du Worso) me habló sobre el libro hace unos años. No lo había leído, pero lo llevaba conmigo. Tenía otro proyecto de película de guerra muy complicado de producir porque se ambientaba en el período 1939-1945 y era en inglés y francés; así que me dije: "Espera, voy a leer esto". Y desde el primer momento atrajo mi atención. Primero, porque yo había dirigido muchas películas sobre hombres. Porque aunque Nathalie Baye tenía el papel principal en El pequeño teniente, estaba escrito para hombres, al igual que De dioses y hombres y El precio de la fama. Tenía ganas de hacer una película sobre mujeres. También me marcó Los paraguas de Cherburgo: trata de la guerra de Argelia, y vemos qué pasa entre bambalinas, esas mujeres que pierden a sus prometidos, que están embarazadas, que se casan, el hombre vuelve alcóholico, pierde su trabajo, los atentados con granadas... Se aprenden cosas. Me di cuenta de que era apasionante hablar sobre la guerra, pero no el frente, y Les Gardiennes me daba la oportunidad de hacerlo. También es la primera vez que adapto una novela, y me motivó mucho hacer mío un libro. Se usan personajes, se inventan otros, se cambia de región y así se convierte en nuestro guion; luego todo eso uno lo critica en el rodaje, que luego critica a su vez en el montaje, y al final la película no tiene mucho que ver con la novela, aunque esté completamente relacionada con ella. La mayor diferencia con el libro es que he quitado muchos personajes infantiles, porque tienen que crecer, y eso es complicado de rodar en una película que comienza en 1914 y acaba en 1918.

Tu film se ambienta en el medio rural francés, durante la Primera Guerra Mundial. ¿Qué investigaciones realizaste?
Vivo desde hace 12 años en el campo, rodeado de granjas, vacas... Además, mi abuelo era campesino, así que tengo una relación especial con el campo. La época de la película me interesaba mucho, con esas mujeres que hacen todas las tareas de los hombres, como conducir a los bueyes, la labranza, el rastrillado... ¡Para ellas era muy duro! Cuando uno se pone a hacer una película, tiene que tratar sobre algo que te apasione; hay que tener tiempo para leer, especializarse, buscarse unos buenos "profesores". A mí me ayudó mucho un historiador durante toda la preparación de la película; me aconsejó para que muchísimos detalles se correspondieran con la práctica de aquella época, como por ejemplo la poda de los árboles que lindan con las granjas. También hay cosas que tienes que saber, aunque no aparezcan en la película.

¿Cómo trabajaste en el ritmo de la película? La vida en el campo es por naturaleza más bien tranquila.
Siempre hay que hacer concesiones. Si de verdad uno quiere rodar en el campo, todos los días son prácticamente idénticos. En la película pasan las estaciones y los años, así que fue difícil saber gestionarlo, tuve que cortar muchos planos.

El modo en que filmas el campo a veces recuerda a un cuadro.
Me tuve que contener un poco, porque no quería que cada plano fuera un cuadro. Pero recreé por completo un cuadro de Degas, cuando la niña se lava de espaldas. Aparte de eso, ya que hablamos del tema, también recreé el plano de Llegada del tren a la estación de La Ciotat, de los hermanos Lumière. Por lo demás, es verdad que estudié muchos cuadros, pero no hay que olvidar que en Francia, en esa época, la agricultura era el 80 % de la actividad económica. Los pintores, que tenían mucho interés por el trabajo, produjeron muchísimos cuadros sobre el campo y el trabajo en el campo: Van Gogh en sus comienzos con el campesino cansado delante de la chimenea, Millet, y muchos otros. Habría sido demasiado evidente abusar de ese mecanismo; era una trampa en la que no quería caer.

(El artículo continúa más abajo - Inf. publicitaria)

(Traducción del francés)

¿Te ha gustado este artículo? Suscríbete a nuestra newsletter y recibe más artículos como este directamente en tu email.

Lee también

Privacy Policy